jueves, 25 de diciembre de 2008

LA ADMIRACIÓN

"...pues experimentar esto que llamamos la admiración es muy característico del filósofo. Este y no otro es, efectivamente, el origen de la filosofía." [Teeteto, 155d. (Gredos, Madrid 1988, p.202)]

"Pues los hombres comienzan y comenzaron siempre a filosofar movidos por la admiración; al principio admirados ante los fenómenos sorprendentes más comunes; luego avanzando poco a poco y planteándose problemas mayores[...] Pero el que se plantea un problema o se admira, reconoce su ignorancia. (Por eso también el que ama los mitos es en cierto modo filósofo; pues el mito se compone de elementos maravillosos). De suerte que, si filosofaron para huir de la ignorancia, es claro que buscaban el saber en vista del conocimiento, y no por alguna utilidad." [Metafísica, 982b- 983a. (Gredos, Madrid 1970, p.14-17)]

En la actualidad tenemos saturados los sentidos de información, y esto lleva a que no nos admiremos, que los hombres perdamos el sentido de la sorpresa, la admiración. Este sentido ha ido siendo dejado de lado a través de la historia. Y al dejarlo a un costado de las cuestiones vitales vamos perdiendo el sentido de filosofar, del arte de pensar.
Como concuerdan los dos grandes autores de la antigüedad, el asombro es el origen de la filosofía. Pero, ¿por qué el asombro, sorpresa, admiración, maravillarse, fascinarse, etc. es el origen de la filosofía?
Tal vez, más que un sentido, en la significación ordinaria, sea un sentimiento. Posiblemente su falta de una explicación completamente científica hace que se la devalúe, o que simplemente se la coloco como un efecto subordinado de los 5 sentidos. No se podría estar dando un significado puntual, solo tendríamos que presentar una aproximación.
La admiración es el vínculo, el puente que une el mundo exterior con el pensamiento. Es por ello que se plantea como origen de la filosofía. Esta unión no es unidireccional, sino que es bidireccional. La relación necesariamente debe darse del mundo exterior al pensamiento y de éste al mundo exterior. Esta bidireccionalidad esta asignada por el simple hecho de existir en el mundo. Entendiendo por mundo a la totalidad de los elementos extraños al individuo).
Es preciso que se efectúe esta relación para que comience el proceso de filosofar. El individuo al admirarse de las cosas externas a él comienza a plantearse relaciones. Estas relaciones consisten en cuestiones que se resumen en las concepciones de tiempo y espacio. El individuo al verse envuelto por elementos ajenos a él reconoce su ignorancia (como lo dice Aristóteles) y la búsqueda misma del conocimiento de estos elementos es lo que constituye la filosofía. No es un fin, sino un medio para que el sujeto reconozca su estado. Al aceptar lo magnifica que son los elementos que lo rodean, se maravilla y los investiga.
Y el otro camino, del pensamiento al mundo exterior, es cuando el sujeto se comprende como una unidad ante otras unidades. Y esta comprensión es lo que lo lleva a relacionarse con el mundo exterior y permitir, en la investigación de éste, seguir las investigaciones sobre él mismo.
Se podría arriesgar un entendimiento de la admiración, como el factor que lleva al hombre a comprender su limitación de conocimiento del mundo exterior y su mundo interior. Y, a partir de esto, el sujeto comienza a interpretar su actuación en el mundo exterior y como su actuación y el mundo exterior mismo realizan cambios en su mundo interior.

5 comentarios:

Cristina Corrêa dijo...

Daniel,
Obrigado por seu comentário.Volte sempre,e escreva,gosto muito de ler!
Não sei escrever em castellano,mas entendi o seu recado!
É sempre um prazer!
Gracias!

Lucas L. Aime (Taqui) dijo...

yo, como lei alguna vez, considero que para el filosofo sea tal, para que la filosofía tenga orígen se deben respetar tres factores fundamentales: la duda, el asombro y las situaciones límites. una vez sido atravesado por estos tres factores el ser que haya sido condicionado para tal fin será filosofo...

el filosofo, (ser extraordinario si los hay) como el artista, mantienen esa duda y ese poder de asombrarse propios de un niño, sin embargo no serán considerados como tales excepto que hayan madurado lo suficiente para poder ser parte de sí...

tal vez no me explique correctamente, pero en este texto hay algo de lo que quiero decir:
http://filosofia.idoneos.com/index.php/Portadas_anteriores/El_valor_constante_del_saber_filos%C3%B3fico

un abrazo dani!

...SOMOS NADA CON CONCIENCIA DE SER... dijo...

Gracias por el comentario Lucas. La verdad que coincido con tu comentario. Sólo que yo sintetizo la duda y las situaciones limites como factores formantes del asombro, o en otras palabras, las causas del asombro.
Ahora estoy revisando la página. Parece ser bastante buena. Gracias por el link.
Daniel

...SOMOS NADA CON CONCIENCIA DE SER... dijo...

fe de errata: donde dice "las causas del asombro" lease "los efectos del asombro"

Cristina Corrêa dijo...

Ainda aprendo a escrever em castelhano pra poder conversar com você!
Obrigado por enriquecer o meu post.Suas palavras são sempre bem vindas!
Vou colocar seu blog no meu,lá nos links que eu visito.

Beijos brasileiros.